Ley del Ritmo
" TODO FLUYE Y REFLUYE "
La Ley del Ritmo nos explica que todo tiene su período de avances y retrocesos;que todo asciende y desciende;que todo se mueve como un péndulo ,que la medida de su movimiento hacia la derecha es la misma que su movimiento hacia la izquierda ;el Ritmo es una compensación.
En nuestro Planeta Tierra tenemos varios ejemplos del cumplimiento de éste Principio:
Las mareas suben a ciertas horas y con un Ritmo regular bajan a otras
Las estaciones del año (verano/invierno-Otoño/primavera)
El pulso en el cuerpo humano
El tic-tac del reloj
Este Principo trabaja estrechamente con la Ley de Polaridad ,si la aplicamos con inteligencia ( metafisicamente )podemos escapar a los efectos negativos de esta Ley en el plano Mental,mediante la transmutación.
Los Grandes Maestros Herméticos descubrieron que había dos planos generales de conciencia : el Superior y el Inferior y esto les permitió elevarse al plano superior y permanecer en él evitando así la oscilación del "péndulo rítmico que los aguardaba en el plano inferior",en una palabra POLARIZABAN su pensar y su sentir ,o sea cuerpo mental y emocional,escapando a la manifestación del Ritmo en un sentido descendente.En lugar de mamnifestarse en el plano conciente del individuo ,se manifiesta en el inconciente ,pero su conciencia no es afectada (Ley de Neutralización)
El metafísico usando la Ley de Polaridad ,se polariza a sí mismo en el polo conveniente (rechazar,no aceptar el participar en la oscilación retrógrada,negando su influencia) se mantiene firme en el polo positivo y permite al péndulo mental cumplir la Ley del Ritmo en un plano mental inconciente,así logra tener dominio sobre sí mismo y no se siente afectado por los hechos ,personas ni situasiones (reconoce y valora el BIEN y reconoce el poco valor de las apariencias).Este Principio encierra la Ley de la Compensación ,equilibra la medida de la oscilación hacia la derecha siendo igual hacia la izquierda .Los estados mentales a ésta misma Ley ,el hombre capaz de gozar intensamente ,también es capaz de sufrir intensamente.